1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Berlín: centro pionero de la moda, devastado por los nazis

Shlomit Lasky
11 de julio de 2023

El regimen nazi destruyó Berlín como un importante centro de la industria de la moda de Alemania, con prendas "prêt-à-porter" de las que empresarios judíos fueron los pioneros.

https://p.dw.com/p/4TjyO
Imagen del diseñador Erwin Scharlinki junto a unas modelos con prendas de vestir.
En 1932, la empresa de Leopold Seligmann se convirtió en uno de los mayores fabricantes de ropa de Berlín. Imagen: Uwe Westphal

Aunque la Berlin Fashion Week (Semana de la Moda de Berlín) se celebra dos veces al año, una en enero y otra ahora, del 10 al 13 de julio, la ciudad alemana no ostenta precisamente el título de capital de la moda. Por eso, incluso los berlineses se sorprenden cuando se enteran de que su ciudad solía ser un próspero centro de esta industria antes de la Segunda Guerra Mundial. Todo gracias a empresarios judíos que fueron pioneros de la moda en Berlín.

Los orígenes de la industria judía de la moda

Las máquinas de coser industriales introducidas en la década de 1850 cambiaron las reglas del juego de una industria de la confección incipiente en Berlín. Por aquel entonces, una camisa ya podía hacerse en una hora en lugar de ocho. Y en mitad de este proceso de industrialización, los empresarios judíos marcaban la pauta.

Durante siglos, no obstante, los judíos que vivían en Alemania habían sufrido restricciones legales que afectaban sus posibilidades de ganarse la vida. Muchos eran vendedores ambulantes de artículos de mercería y ropa de segunda mano, mientras que los más adinerados comerciaban con telas, explica Uwe Westphal, periodista y autor del libro "Fashion Metropolis Berlin 1836 - 1939. La historia del auge y la destrucción de la industria de la moda judía".

Pero con la la instauración del Imperio Alemán en 1871 se consagraron nuevos derechos para los judíos, lo que les permitió prosperar. Por aquel entonces, Berlín tenía algo más de 800.000 habitantes pero, en la década de 1920, se convirtió en una metrópoli con una población de más de cuatro millones, de los cuales el 4% eran judíos.

Un diseño de Lissy Edler.
Un diseño de Lissy Edler (que más tarde adoptó el nombre de Alice Newman), una destacada diseñadora que escapó de los nazis en 1936 y se fue a Londres. Imagen: Uwewestphalarchives

Berlín, un centro de moda "prêt-à-porter"

Las tendencias de la moda de París, especialmente de alta costura, eran demasiado caras para las clases medias, aunque cada vez suscitaran más interés. A los empresarios judíos "se les ocurrió la idea de producir ropa de moda barata según medidas estandarizadas", explica Westphal. "La demanda estaba ahí, y la industria creció rápidamente".

La industria de la moda berlinesa alcanzó su apogeo en los años 20, con más de 2.700 empresas de moda, en su mayoría propiedad de familias judías. Nombres como los hermanos Manheimer, David Leib Levin, Nathan Israel y Hermann Gerson eran sinónimos de la nueva y creciente tendencia de la moda "prêt-à-porter" ("listo para llevar").

Los empresarios judíos se adaptaron rápidamente a las nuevas necesidades de la era industrial: "Sabían lo que le gustaba a la gente y tenían contactos internacionales con los fabricantes de tejidos", afirma.

Golpe a los empresarios judíos

El antisemitismo y la envidia por el éxito de los judíos en la industria se manifestaron muy pronto. Pero con la llegada de Hitler al poder, en 1933, estas empresas sufrieron un severo golpe, empezando por el boicot contra sus tiendas establecido el 1 de abril de ese mismo año, y luego con la prohibición de pedir préstamos bancarios.

En noviembre de 1938, grupos de partidarios nazis asaltaron cientos de empresas en la zona de Hausvogteiplatz, en el distrito de Berlín-Mitte, por aquel entonces el epicentro de la moda judía en la capital. "De las 2.700 empresas de moda judías, sólo quedaron 24, que también fueron confiscadas como muy tarde en 1940", explica Westphal.

Josef Neckermann y Hugo Boss son sólo dos nombres destacados entre los varios propietarios de empresas que se beneficiaron enormemente de la apropiación ejecutada por los nazi de empresas judías.

Los diseñadores de moda berlineses de los años 50 y 60 ya no tenían competencia judía. Pero, para entonces, la industria alemana de la moda ya se había trasladado de Berlín a Düsseldorf y Múnich, debido a la división de la ciudad.

Imagen del monumento conmemorativo en la Hausvogteiplatz, Berlín.
Un monumento conmemorativo en la Hausvogteiplatz, en Berlín.Imagen: Uwe Westphal

Berlín rehúye de su historia

"Lo que me asusta es que, desde 1945, nadie quiere recordar esta cultura de la moda ni se conmemora a los muchos diseñadores de moda judíos", afirma Westphal. "Esto contrasta con muchas empresas alemanas que estuvieron profundamente implicadas en el Estado nazi y que han intentado reparar culpas desde entonces", dice.

Como parte del próximo Festival de la Cultura Judía, el 7 de septiembre tendrá lugar un desfile de moda de diseñadores judíos e israelíes contemporáneos que, según Westphal, será el primer desfile de moda judía en la capital alemana desde 1939.

(aag/ers)